Mami, ¿Qué son los ángeles?
Pregunta, inocentemente, Emilia, con una gran sonrisa a su madre; sus 4 años, imprimen una ternura infinita a la pregunta, y da cierta paz, sobre todo sí se está en una sala de espera de un hospital.
Su madre con la misma ternura se arrodilla para estar a la altura de la pequeña, la mira y le dice:
– Son seres celestiales que nos protegen de todo.
– ¿Y nos traen felicidad?
– Por supuesto -responde con seguridad la madre-
Emilia clava su mirada sobre el hombro de madre y apuntando con su pequeña mano hacia el fondo del pasillo dice:
– Entonces ¿Por qué ese ángel se lleva a mi abuelito, sabiendo que eso nos va a poner muy tristes?
Su madre mira hacia donde apunta Emilia y no ve nada, luego un médico se pone frente a ella para decirle que su padre acaba de morir.
Aunque no parezca esta es una historia de ángeles, porque ellos también están encargados de cumplir el plan Divino de Dios.
Los ángeles son mensajeros divinos, nos traen paz, tranquilidad, pero sobre todo son guías de la humanidad, nos muestran cual es nuestra función en la tierra para cumplir un plan maestro celestial. No siempre esa función nos trae felicidad como el caso de la mamá de Emilia, quien perdió a su padre, pero resulta que esta era plan que tenía pensado Dios para ella.
Los ángeles no hacen lo que nosotros queremos, hacen lo que es mejor para nuestro crecimiento personal y para lo que están alrededor tuyo; sí vemos la historia de la madre de Emilia, lo que se hubiera esperado es que el abuelo recuperara su salud “milagrosamente” pero no fue así.
Pero ¿Qué hacer en este punto?
Los ángeles, al ser guía de la humanidad, le pueden ayudar a esta mujer a encontrar consuelo y respuestas sobre lo que acaba de pasar, un ritual Arcángel Gabriel, más una meditación al ángel custodio, puedo hacer que la respuesta a la mujer le de consuelo.
Que las cosas no salgan como tú esperas, no es que los ángeles no te escuchan, sino que son inteligencias superiores que te van a llevar a mejores rumbos.
¿Qué pasó con Emilia y su mamá?
La madre tenía un dolor profundo por la pérdida de su padre, pensó que su fe en los ángeles lo iban a salvar de la muerte, muy de mala gana hizo un ritual al Arcángel Gabriel, y regresó a mi consultorio a ver los efectos, vino con Emilia.
Al preguntar a la madre si vio o sintió algo, dijo que no, entonces Emilia dijo:
– No es cierto mami, cuando rezaste al angelito, yo vi a mi abuelito, junto a un ángel, ya no sufría, ya no le dolía su barriga (el abuelo murió de un cáncer al páncreas). por fin lo vi feliz, tenías razón mami, los ángeles dan felicidad.
La madre suspiró tan profundo al oír las palabras de la niña, que se podía sentir como su alma sanaba, y así sin más ella sintió paz.
EL OBRAR DE LOS ÁNGELES ES MARAVILLOSO, PERO SIEMPRE SERÁ MISTERIOSO.